GUITARRA FLAMENCA MANUEL REYES
8.800 €
Guitarra flamenca construida por el maestro guitarrero Manuel Reyes, reconocido mundialmente como uno de los mejores constructores de guitarras flamencas, con acabados sencillos pero impresionantes, sus guitarras son muy preciadas entre aficionados y profesionales, entre ellos podemos destacar a Tomatito, Vicente Amigo, Antonio Rey, etc.
- AÑO: 1970
- AROS Y FONDO: Ciprés
- TAPA ARMÓNICA: Pino abeto alemán
- BARNIZ: Respasado – Gomalaca (muñequilla)
- TIRO: 658 mm
- ESTADO: Excelente
Agotado
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS
PESO | 10 kg |
---|---|
AÑO | 1970 |
AROS Y FONDO | Ciprés |
TAPA ARMÓNICA | Pino abeto alemán |
BARNIZ | Goma laca repasado (muñequilla) |
TIRO | 658mm |
CEJILLA DE ARRIBA | 53mm |
CLAVIJERO | Mecánico |
ALTURA DE CUERDA EN TRASTE 12 | 3mm |
ALTURA DE CUERDA EN PUENTE | 8.5mm |
TENSIÓN | Media |
ESTADO | Excelente |
ESTUCHE | Incluido |
DISPONIBILIDAD | VENDIDA |
DESCRIPCIÓN COMPLETA
Guitarra flamenca construida por el maestro guitarrero Manuel Reyes, reconocido mundialmente como uno de los mejores constructores de guitarras flamencas, con acabados sencillos pero impresionantes, sus guitarras son muy preciadas entre aficionados y profesionales, entre ellos podemos destacar a Tomatito, Vicente Amigo, Antonio Rey, etc.
La selección de maderas utilizadas para este instrumento son, para la tapa armónica Pino abeto alemán de gran calidad y curación de largos años que hace que tenga una acústica impresionante, cipres para el cuerpo (aros y fondo) de un veteado y belleza excepcional…
Gracias a la selección de maderas utilizadas para este instrumento hacen que su sonido sea totalmente extraordinario, con una buena resonancia y aportando mucha profundidad y volumen en los bordones, con unas primas cristalinas ofreciendo una comodidad perfecta para las dos manos para el guitarrista.
La pulsación de esta guitarra es de tensión media-alta con las cuerdas a una altura perfecta para su ejecución.
La guitarra esta en un estado excelente, simplemente presenta una pequeña fisura en la tapa perfectamente reparada por Jose Fernández y repasada de barniz por el maestro Antonio Ariza.